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TAL CUAL- ¿QUEDATE EN CASA O MUERETE EN CASA?
Luis Carlos Rodríguez González
La estrategia estelar del Gobierno de México contra la pandemia del Covid-19 no son las pruebas de detección, ni el uso de cubrebocas, sino una campaña llamada “Quédate en Casa” que provocó que miles de personas no acudieran a los hospitales ante los primeros síntomas del virus, que muchos murieran en sus casas o en las salas de espera de los nosocomios, todo ello con el fin de no saturarlos y decir que en México no ocurrió una tragedia como en otras naciones.
Vaya estrategia y campaña exitosa que ya tiene como saldo preliminar “y con la curva aplanada” como se jactan nuestros gobernantes a más de 80 mil muertos y según la UNAM una cifra “negra” de por lo menos otros 100 mil no registrados o mal registrados con otras enfermedades en las actas de defunción, pero que fueron víctimas del Covid-19.
El doctor Héctor Hernández Bringas, del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias (CRIM) de la UNAM, dijo a The Exodo “la verdad es que hay una cifra negra en el tema de las muertes. Ahorita tenemos más de 80 mil, pero algunas estimaciones nos indican que esto podría multiplicarse por 2 o 2.5 por ciento”. Es decir, más de 100 mil muertes adicionales que no contabiliza el subsecretario Hugo López-Gatell”.
El catedrático de la UNAM puso ejemplo de estas muertes no contabilizadas como Covid-19, que se tratan de ocultar o matizar diciendo que fue por paro un paro respiratorio. El hecho de que hace un mes hubo un déficit de 150 mil actas de defunción en el país.
“Muchas personas que están muriendo por Covid-19 en zonas urbanas populares, en rurales, en pueblos indígenas, ni siquiera se les hace una prueba y terminan poniendo en el acta de defunción que murieron por un paro respiratorio. Muchas no llegaron ni a un hospital porque no existen”, apuntó.
Por otra parte, la Consejería Jurídica del Gobierno de la Ciudad de México, reconoció que el 64 por ciento de los fallecimientos por Covid-19 ocurrieron en el hogar de las personas sospechosas o confirmadas como portadoras del virus.
El informe que abarca hasta julio de 2020 puntualiza que el segundo lugar de muertes es el hospital, con un 34 por ciento; le sigue la vía pública, con 3 por ciento y al final de los porcentajes se posicionan los reclusorios, con 2 por ciento.
Todo ello nos indica que de las casi 14 mil muertes en la Ciudad de México por Covid-19 al menos 8 mil 960 personas fallecieron en sus casas, sin apoyo médico. Si eso ocurrió en la capital del país donde se concentra el mayor número de hospitales, ¿cuáles serán las cifras en otras entidades como Guerrero, Chiapas, Michoacán o Oaxaca? Por mencionar algunas.
Claro que la campaña “Quédate en Casa” fue en éxito, pero debió llamarse “Muérete en Casa”. Sólo hay que recordar las declaraciones de López Gatell, siempre avaladas desde el púlpito presidencial, de no acudir a los hospitales y asistir sólo en casos graves. No se les saturaron, ni hubo escenas como en otros países porque “primero los pobres” se murieron en sus casas.
La secretaria general del PRD, Adriana Díaz, ha criticado la estrategia contra el Covid-19 y señalado que un gran porcentaje de estas muertes se pudieron evitar, pero hay una actitud condescendiente, cómplice y hasta criminal de mantener en el cargo a López Gatell. Tal Cual.