TAL CUAL
BIENVENIDOS PAISANOS, LA ESTRATEGIA MORTAL EN LA PANDEMIA
Luis Carlos Rodríguez González
México nunca cerró ni cerrará sus fronteras durante la pandemia del Covid-19, ello con el erróneo y populista discurso que no somos un país que no restringe el tránsito de ciudadanos y visitantes. Las cifras ahí están: oficialmente casi 140 mil muertos y de acuerdo a estimaciones de la UNAM más de 300 mil.
En vísperas de la temporada invernal y de fin de año en México, cuando todo indicaba que no había freno en el número de muertes y contagios, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador no sólo no restringió el éxodo de al menos medio millón de paisanos que viajaron a México, al contrario, sino los alentó.
Incluso instruyó la creación de una oficina en Palacio Nacional dependiente de manera directa de la presidencia de la República, desde la que se coordinarían todos los apoyos de protección para los connacionales con el objetivo de que “no los maltraten y no los extorsionen”.
El fin de año del 2020 ni los maltratos, ni los robos, ni las extorsiones de funcionarios públicos y de la delincuencia organizada para los mexicanos que viajaron desde Estados Unidos, disminuyeron. Pero sumado a ese turismo de “alto riesgo”, hoy en miles de comunidades y pueblos del país se vive la tragedia por los contagios provocados por el éxodo de paisanos alentado desde el púlpito presidencial.
Nadie valoró ni en la Presidencia de la República, ni en las secretarías de Salud o de Gobernación, el grave riesgo de no frenar, restringir o advertir del riesgo del ingreso de cientos de miles de paisanos a comunidades y pueblos de todo el país, principalmente de Michoacán, Zacatecas, Guanajuato, Hidalgo, Guerrero, estado de México y la capital del país, por mencionar algunos.
De acuerdo con el Consejo Nacional para la Evaluación de la Política Social (Coneval) al 31 de diciembre han identificado casos de Covid-19 en 84.6% de los 623 municipios indígenas.
No se trata de criticar el merecido descanso y vacaciones para los cientos de miles de paisanos que cada año regresan para ver a sus familias en México, más bien de enmarcar el desinterés, más allá de las remesas, de las autoridades mexicanas en la salud de esos mexicanos y sus familias, que estuvieron en riesgo y muchos están contagiados por Covid-19.
Sin pruebas rápidas en la frontera norte al ingresar a México, se creyó que un termómetro y un poco de gel, se podría detectar y frenar los contagios. En los aeropuertos se vivió lo mismo. Aglomeraciones, sin sana distancia, ni protocolos de salud.
Ahí están los resultados. Historias de contagios masivos de familias binacionales, fallecimientos y tragedias en estados y municipios expulsores de mano de obra a Estados Unidos, los tradicionales que ya mencionamos e incluso comunidades indígenas y rurales de Guerrero y Oaxaca. Pero sigamos abrazándonos, sigamos alentando el contagio a costa de la salud y vida de los llamados “héroes” en el pulpito presidencial. Bienvenidos Paisanos. Tal Cual.
Foto Instagram: @ProgramaPaisano