Redacción
A pesar de que desde hace 40 años aparece en los organigrama de los cárteles como uno de los capos más importantes y buscados en México y Estados Unidos, Ismael “El Mayo” Zambada nunca ha pisado una cárcel y hasta ahora era un narco intocable y cabeza del poderoso Cártel de Sinaloa.
La Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos (DEA) y el Departamento de Estado, ofrecían una recompensa de 20 millones de dólares a quien proporcione información que lleve a la captura del capo sinaloense, de quien se han escrito y cantado decenas de narco corridos.
Ha sido en los gobiernos del PRI, PAN y ahora de Morena un “narco intocable” y también se le conoce como el “Señor de la Montaña”.
Su carrera delictiva inicia en los años ochenta cuando pasa de ser un agricultor con ambiciones a formar parte de la cúpula del narcotráfico mexicano. El Mayo llegó a la cúspide en 1989, cuando detuvieron al capo, Miguel Ángel Félix Gallardo.
Su nombre aparece en los expedientes de inteligencia de Estados Unidos desde hace 40 años. Desde su adolescencia empezó su vida como narcotraficante. Actualmente tiene 76 años y había sido detenido por los cargos en los que actualmente se le acusa.
De acuerdo a su ficha de búsqueda, es un hombre de 1.75 metros y 75 kilos. “El Mayo” fue cofundador del Cártel de Sinaloa junto aJoaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, preso en los Estados Unidos.
Diversas Cortes de Distrito de Norteamérica han iniciado indagatorias contra Zambada García por dirigir una organización criminal, conspiración, homicidio, lavado de dinero, fabricación y distribución de drogas.
En los últimos años se le ha responsabilizado, junto con los llamados “Chapitos” de la la producción, distribución, tráfico y venta de fentanilo.
