La Cámara de Diputados fue el escenario de una significativa reunión el pasado 2 de diciembre, que reunió al Gran Rabino Sefardí de Israel, David Yosef, con el legislador Pedro Haces y un grupo de destacados empresarios mexicanos de origen judío.
Aunque se trató de un encuentro privado de carácter institucional, su impacto trasciende lo ordinario, enviando un poderoso mensaje de fortalecimiento de lazos económicos y entendimiento intercultural.
¿Cuáles son los ambiciosos planes de inversión que se busca impulsar en el país y cómo este diálogo abierto con una figura religiosa de talla mundial podría redefinir la colaboración entre México e Israel
La visita del Rabino David Yosef, una de las más altas figuras religiosas del mundo sefardí, fue gestionada a petición de empresarios mexicanos, considerados importantes generadores de riqueza y empleo.
El diputado Pedro Haces, vicecoordinador de Operación Política de Morena, sirvió como anfitrión, enfatizando que la Cámara de Diputados es la “casa del pueblo” y que su misión es abrir canales de diálogo que sumen al desarrollo y la prosperidad de la nación.
El encuentro fue calificado por los participantes como una plataforma esencial para futuras colaboraciones en los ámbitos académico, social y, primordialmente, económico. La intención es que este diálogo se consolide como un canal institucional permanente con el Poder Legislativo.
Si bien la reunión, por su carácter privado y la sensibilidad del contexto internacional, generó algunos desacuerdos entre algunos legisladores, estas críticas quedaron claramente al margen de la agenda central.
El diputado Haces reiteró que el objetivo primordial es escuchar a todos los sectores que contribuyen a la sociedad mexicana.
La postura institucional fue clara: priorizar el diálogo constructivo y la oportunidad de inversión que beneficia directamente a México, por encima de las diferencias internas.
